Los inicios de la historia de la Bodega Miquel Jané, se remontan a finales del siglo XIX, fecha que es el inicio de la actividad de la bodega. En aquellas épocas, producían vino a granel y se distribuía principalmente en Cuba, gracias a que la familia era propietaria de una empresa de fragatas que cruzaban el océano.
A lo largo de las generaciones familiares se van adquiriendo fincas vinícolas , entre ellas la finca Cal Costas y la finca La Baltana Vella de las que se elaboran actualmente todos los vinos Miquel Jane.
En el año 2002, Josep Miquel Jané transforma el negocio del vino a granel en la venta de vino embotellado con su marca propia: MIQUEL JANE. Actualmente la cuarta generación familiar sigue liderando el negocio trabajando un total de 51ha en plena reconversión a la agricultura ecológica y produciendo uva de la más alta calidad y ampliando sus mercados de venta al exterior.